Los responsables de Microsoft han decidido comenzar a vender el sensor Kinect separado de la consola Xbox One.
Los de Redmond ya habían empezado a vender su consola de nueva generación, la Xbox One, sin su sensor de movimiento. A un precio de 399 dólares, las ventas de la consola han mejorado, hasta el punto de que la versión sin Kinect ha duplicado las ventas de la original.
Sin embargo, para satisfacer la demanda de los usuarios, Microsoft acaba de anunciar que a partir del próximo 7 de octubre en Estados Unidos empezará a vender Kinect en solitario. El dispositivo se podrá adquirir por 149,99 dólares en un paquete que incluye el juego Dance Centro Spotlight de la desarrolladora Harmonix, informa ABC.
En un comunicado, los responsables de ventas de la consola aseguran que "Xbox One es mejor con Kinect, ofreciendo posibilidades ilimitadas". No obstante, plantean ampliar las opciones de compra de los usuarios que podrán adquirir o regalar la consola sin Kinect para más tarde completar su equipo o viceversa.
Parece que Xbox One empieza a remontar de los malos resultados de venta iniciales en comparación con su competidor más directo, PlayStation 4. Hasta el punto de que hace sólo unas semanas Microsoft anunciaba que ha distribuido 1,1 millones de consolas entre Xbox One y Xbox 360 durante el segundo trimestre de 2014. Unas cifras que encontrarían su explicación precisamente en el lanzamiento de un paquete para la consola más barato sin Kinect.
Foto: © Creative Commons - Flickr: BagoGames.
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